La Nueva Luna de Leo - Agosto 2016

La consigna de la lunación es: crear. El pensamiento es una energía inteligente, sepamos utilizarlo amorosamente.

La Nueva Luna en Leo cae el día 2 de agosto a las 20:46, hora solar y a 10º564’ de este signo. 

La Conjunción Sol-Luna a principios del segundo decanato de Leo, -decanato regido por el Sol, como todo el signo-, recrea el acto interno de la Creación. Es el momento sublime de esa unión entre lo masculino y lo femenino, cuando la luz se integra y se interioriza para desplegarse y expandirse sobre la faz de la tierra.

El Sol de Tiphereth-conciencia exterior, y la Luna de Yesod-imaginación interior, se funden para proponernos asimilar y asumir la existencia. Leo es el fiel y digno representante de la conciencia y debemos rendirle tributo comprendiendo que cada día, cada amanecer, cuando el Sol luce en el cielo, nos está permitiendo vivir un nuevo día, creando nuevas oportunidades. El Sol en el cuerpo es el corazón que late al unísono con el corazón del mundo, del universo.

Esta lunación nos ofrece la posibilidad de ser mejores, más amorosos, más “de corazón”, más unidos y más conscientes de nuestros actos y de cómo afectan a los demás, a la sociedad, al planeta; esta es nuestra gran responsabilidad y la idea del novilunio de Leo.

Los Leo son, sin duda, los más protagonistas, aunque el Sol ya entró el día 23 de julio en su signo. Pero ahora la fuerza de esta conjunción nos invita a plantar semillas de nuevas realizaciones, y en esta ocasión son semillas de luz que destilen la Sabiduría del corazón, esa frecuencia cardiaca que está más viva y activa durante este periodo.

El grado de la lunación nos sugiere, según las enseñanzas de Kabaleb, que impulsemos la voluntad de Kether, generadora de cuanto hacemos y deshacemos, y donde reside el soplo de la Libertad. Kether nos libera, hace de nosotros seres con criterio y libre albedrío. Con el Sol y la Luna dispondremos de una gran fuerza de voluntad. Es probable que también nos dejemos llevar por la inconsciencia, pero al final todo acto tiene su consecuencia y a menudo necesitamos aprender con la consigna: ¡al revés te lo digo para que me entiendas! Así, ese propósito, pese a todo, se convierte en una especie de misión primordial que puede movilizar consciencias. También va a activar nuestra imaginación, que puede convertirse en una poderosa aliada y ayudarnos a reinventarnos, a encontrar soluciones geniales. Si la Voluntad actúa como un imán, nos dice Kabaleb, atraerá todo cuanto se encuentre en afinidad con esa función, por lo tanto podremos ser guías para los que buscan sabiduría, una puerta que lleva a la luz y el amor universal.

Si lo aplicamos, por ejemplo, al contexto político que se vive en España, podría alzarse una figura líder que aunase esfuerzos, ideas, que ejerciese de ejemplo. Pero dejemos claro que para encajar las energías lumínicas de una conjunción Sol-Luna en grado Kether, hay que vibrar muy alto y no parece que nadie esté por la labor.

Un grado Kether promueve la unión, la solidaridad, pero también puede exponer lo contrario, ya se que trata de una voluntad libre e imperativa, lo que puede dar lugar a ataques de ego inferior y que, en nombre de un dios menor, se promuevan actos extremistas.

Los Genios de la Lunación nos proponen en sus programas correspondientes:

Yerathel nos insta a ser portadores de armonía, y  actuar en defensa de las leyes cósmicas y de nuestra propia conciencia. Nos permite liberarnos de los enemigos, internos y externos y de las falsas creencias o lo que se opone a nuestro propio desarrollo. Nos ayuda a dejar de remar a contracorriente, o de hacer las cosas al revés y poner cada cosa en el lugar que le corresponde, para poder superar y tomar las decisiones que no podemos posponer. 

Harahel nos ayuda a difundir el mensaje de la lunación, así como responsabilizarnos de nuestros actos. Nos influencia positivamente en la administración de nuestros valores; nos aporta prosperidad hallando los tesoros ocultos en nuestro interior y nos permite obtener con abundancia lo que deseamos, siempre y cuando forme parte de lo que nos hemos ganado y merecido.

Con estas premisas, todo tiene que ser mucho más fácil, solo es cuestión de conectarnos con estas fuerzas de la naturaleza y utilizar adecuadamente estos carburantes lumínicos.

Una última reflexión sacada de las enseñanzas de Kabaleb en su Interpretación del Apocalipsis de Juan, arroja más luz a los periodos lunares:

Es a partir de las Nuevas Lunas que los doce frutos deben ser elaborados. Cada mes, la Nueva Luna cae en un signo distinto del Zodíaco, y ello constituye una llamada de los obreros al trabajo. Juan nos habla de doce frutos, pero cada uno de esos frutos tiene treinta variedades, como treinta son los grados de cada signo del Zodíaco, cada uno con sus propiedades genéricas. Si supiéramos conscientemente lo que estamos haciendo, elaboraríamos el fruto con mayor rapidez y nos integraríamos ya al orden universal, siendo una pieza en la belleza y armonía cósmicas. Nuestros estudiantes, tanto los que trabajan individualmente como en grupo, deben ser conscientes de esa elaboración y realizarla diariamente. Para ello, es preciso ver en qué grado del Zodiaco cae la Nueva Luna y estudiarlo en función del planeta regente de ese grado, del Decanato a que pertenece y del programa del Genio que rige por Rotación en aquel día. Ello nos dará una idea de cuál es el Trabajo a realizar y de los útiles necesarios para ello.

Un último apunte o reflexión a esta crónica Astrocabalística

Hay quien me comenta, con respecto a los análisis de la Nueva Luna, que son demasiado largos; que la gente suele interesarse solo por las líneas que dedico a cada signo; las leen y basta, lo demás les sobra. Pero yo me empeño en seguir ofreciendo otra clase de reflexiones porque son, a mi entender, más importantes que la influencia de cada signo. Se trata de tomar en consideración lo que cada lunación nos propone con respecto a una tarea común. El protagonismo de cada conjunción determina un trabajo específico, que si bien tenemos que realizar individualmente, nos compromete a todos. Se sepa o se ignore, estamos todos metidos en el mismo espacio y proyecto para optimizar la buena marcha de la organización planetaria.

Por otra parte, mi intención no es pronosticar sino, en todo caso, aconsejar dependiendo de los aspectos que se dan durante la lunación y utilizar la astrología cabalística para lo que sirve: ofrecer una herramienta de crecimiento personal. Recordemos que los astros proponen y el ser dispone. Pero si somos capaces de captar las energías planetarias desde dentro, esa percepción y visión interna agudizarán nuestra intuición y nos sentiremos partícipes de la naturaleza y de su funcionamiento.

El conocimiento, (Binah) y la sabiduría, (Hochmah) tienen que servir para comprender desde lo más sutil y elevado, a lo más material y práctico.

Los astros no nos dicen cómo debemos comportarnos, -insisto-, sino que es la parte planetaria que late en nuestro interior la que se comunica y se alinea con la energía que desprende la naturaleza exterior: astros, humanos, vegetales, minerales, animales, componiendo una sinfonía que a menudo desafina por falta de conciencia y armonía. Como bien dice Jordi Pigem en su último libro "Inteligencia Vital" (Editorial Kairos 2016), una pequeña joya en tamaño y grande y valiosa en contenido:

Para reencontrar nuestro lugar en el mundo es necesario reconciliar la vida y la mente, la naturaleza y la inteligencia.

O en otras palabras de Mario Javier Saban en "La Cábala, la psicología del misticismo judío" (Editorial Kairos, 2016)):

El mal crece a partir de nuestra ignorancia, en cambio, al aumentar nuestro nivel de Daath, (conocimiento), solamente crece el bien. Si anuláramos hipotéticamente el espacio-tiempo, todas las distorsiones para alcanzar la –verdad eterna-, quedarían aniquiladas, y podríamos percibir automáticamente la dimensión más alta de Kether

Así, cuando superamos las dualidades propias de la materia y nos situamos en el conocimiento de esa verdad que nos atañe a todos, recreamos el edén, (Hesed), y es entonces cuando encontramos nuestro lugar en el mundo y desaparecen las distorsiones. Ese es el propósito de mi humilde aportación y de mi interés publicando cada mes estas crónicas.