La Nueva Luna de Libra - Octubre 2016

La consigna de la lunación es: una lunación muy propicia para la reconciliación. La clave es pasar las emociones por el tamiz de la razón.

La Nueva Luna cae a 08º15’de Libra el día 1 de octubre a las 00:13 hora solar.

La Nueva Luna de Libra en el primer decanato, -el decanato propio-, y regido por Venus, y en un grado Yesod-Luna, representa el poder femenino, la ensoñación, la posibilidad de plantar ideas tangibles y construir el edificio de la razón. Libra representa la justicia, la toma de conciencia de que el mundo es una obra colectiva, como diría Kabaleb, y que la individualidad representa una etapa de transición hacia la gran participación en esa gran misión holística. Libra suele asociarse con las uniones, la pareja, la búsqueda del otro, del complemento ideal animando objetivos comunes. Este signo es propenso a los pactos, al entendimiento, a la conciliación de intereses contrarios que se vuelven complementarios. Una relación de pareja se basa en tender puentes al otro, se fundamenta en la confianza, en el diálogo, en el pacto de colaboración para que funcione, y no en fomentar la figura del inválido emocional, con el desueto mantra del: “sin ti no soy nada y no puedo vivir”.

En mis clases de Astrocábala, cuando abordamos la definición de la Casa VII y de Libra, suelo insistir en una correcta ilustración de este sector cuando explico que una relación de pareja no es, en definitiva, una labor sentimental, sino una tarea en la que hay que emplearse a fondo, pactar, ser razonable, emplear la lógica y la mente. La gente suele extrañarse, se inquieta y me pregunta, ¿pero no se trata de una empresa amorosa?, claro, es que el amor forma parte de la vida, es la vida misma, por lo tanto, una relación de pareja es puro amor, pero no exenta de lógica, de coherencia, de diálogo; la base de ese amor, si no se construye sólidamente, si no se pacta, acabará desequilibrándose.

Todo lo que suene a música romántica, pero esconda una coacción, carecerá de los mínimos para que funcione. Quien controle o coarte la libertad ajena, quien exija un intercambio, quien justifique sus acciones primarias; quien ahogue al otro con sus sentimientos, no estará glosando el amor, sino un pálido reflejo de sus atribuciones. Las relaciones de pareja requieren una paciente labor de comprensión, de crecimiento. Compartir, complementarse; ceder en algunos aspectos, dar luz en otros, y contribuir a una mayor felicidad, pero jamás vivir a expensas ni en la sombra de nadie. Y para conseguirlo, hay que pactar, hay que dialogar, hay que exponer, debatir, asociarse, para llevar a cabo una obra común.

Esta es la tarea del primer decanato de Libra y precisamente la de la lunación que nos ocupa. La posibilidad de construir algo sólido, de recomponer una relación, de obtener una segunda oportunidad, se trate de parejas o socios, se activa muy especialmente durante este tránsito. Se requiere dedicación, mucho amor, mucha compasión, mucha ternura, pero también las ideas muy claras de lo que se desea.

Libra se encarga de crear los arquetipos de la convivencia social, donde nace la lógica; es por ello que estos nativos tienen fama de indecisos porque las ideas, la razón, son aún incipientes, pero Júpiter en tránsito durante todo un año estará dispuesto a ayudar a quien desee reafirmarse.

Como diría Kabaleb, citando a Descartes: «Lo único que me diferencia de la forma de pensar de otras personas, es que a lo mejor ellas han dedicado una hora a pensar en un tema determinado y yo he dedicado al mismo tema mil horas. Cuando ellas también hayan dedicado mil horas, estaremos totalmente de acuerdo sobre la cuestión»

Los grados en los que se posición el Sol y la Luna nos hablan de concretar propuestas, crear lo permanente, ordenar las cosas según una lógica y, si es trascendente, ¡aún mejor!, porque recordemos que todo lo de arriba es igual que lo de abajo y viceversa, -¡aunque aquí bajo aún nos falte mejorar taaanto!-, pero la búsqueda siempre acaba dando resultados y las preguntas, respuestas.

Esta es la propuesta de la lunación, seguir de cerca el proceso de siembra de cambios en nuestra forma de relacionarnos; buscar la conciliación y encontrar la verdad y la justicia en todos nuestros actos. Todo ello adornado con los destellos de Venus: con mucha imaginación, sensibilidad y empatía. Podemos plasmar en la realidad los deseos, (grado Yesod), pero ¡cuidado!, no a cualquier precio, porque las cuadraturas de la lunación pondrán de manifiesto todo aquello que no se hace de forma equitativa, transparente, justa y razonable, sobre todo debido a las disonancias de Plutón con el Sol, la Luna, y Júpiter, (por orbe), que destaparán las falsedades, sacando a la luz las injusticias, los abusos y la falta de principios.

Los Genios de la Lunación nos proponen en sus programas correspondientes:

Haamiah nos propone promover la armonía. Nos otorga un gran poder de transformación para encontrar el camino cuando lo hayamos perdido. Podemos, con su ayuda, deshacer bloqueos emocionales y comprender con la razón el porqué de las emociones.

Sealiah nos ayuda a reactivar la voluntad, a reanudar la marcha y seguir adelante cuando nos hemos atascado. La clave es volver al equilibrio, revitalizarse, y canalizar adecuadamente las energías y potenciar todo lo noble y elevado, consiguiendo un buen equilibrio emocional.