Ponencia sobre la Astrología Cabalística
Debido al poquísimo tiempo que dispuse y dispusimos todos para expresarnos, y tal y como me pidieron algunos asistentes, reproduzco aquí la información sobre la que me basé para desarrollar mi ponencia durante el Congreso de Astrología de la Nueva Era.
La Astrología
La ventaja de haber nacido en una familia de personas un tanto “diferentes”, me ha dado la posibilidad de bucear en muchas disciplinas que me han ayudado a comprender mejor cual es mi trayectoria y mi trabajo humano. Podríamos decir que caí de pequeña en la marmita del conocimiento astrológico y otras enseñanzas que me han llevado a desarrollar lo que es, ahora, una de mis principales actividades, el estudio y enseñanza de la Cábala y la Astrología cabalística, una camino de conocimiento espiritual que trata de aclararnos muchas preguntas acerca del por qué o para qué nos suceden las cosas.
La Cábala
La Cábala, siendo una de las sabidurías más antiguas de nuestra historia, sus enseñanzas son totalmente vigentes hoy día. Se la considera como un manual del comportamiento humano, así como de la organización en el macro y microcosmos. Nos describe la relación de todo proceso de vida interior y exterior, de todo lo que existe. Podríamos decir que es la matriz de las culturas de desarrollo espiritual occidental. El origen de esta enseñanza proviene del Antiguo Egipto, aunque más tarde forma parte del saber de la mística hebrea. Se desarrolla posteriormente sobre todo en Europa a partir del los siglos XI. Es parte del sistema filosófico y teosófico revelado al ser humano para contestar las preguntas eternas del hombre acerca de la naturaleza del Mundo, de Dios, del Universo, del Génesis y del destino de la humanidad. Cábala significa “transmisión”. El Zohar o el Sepher Yetzirah, por citar dos de los más importantes son libros de estudio y en ellos hallamos los fundamentos de la astrología, los signos y los 7 planetas. Kabaleb dedicó toda su vida en descifrar las claves y desarrollar la astrología y la Cábala para convertirlo en la Astrocábala.
Fundamentos de la Astrocábala
La Astrocábala utiliza los mismos fundamentos que la astrología tradicional, arquetipos zodiacales, planetas, aspectos, etc.… pero además basa su estudio en la estructura del Árbol de la Vida o Etz Hayim, un organigrama que se compone de 10 Centros o Sephiroth que guardan correspondencia con el sistema planetario, repartidos en 3 columnas que se conectan mediante Senderos.
Una de las primeras particularices es que el estudio de cada signo empieza por los elementos en orden de aparición, lo que definimos como el Zodiaco Constituyente, así tendremos que primero serán los 3 signos de Fuego, después el Agua, el Aire y la Tierra. El estudio de las Casas no varía, aunque lo basamos en casa iguales.
Por otra parte, asociamos los elementos con una letra hebraica, que sabemos que son vibraciones de alto voltaje, utilizando el Tetragrámaton.
YOD – HE – VAV – HE
1.- Fuego, es YOD.
2.- Agua – HE
3.- Aire – VAV
4.- Tierra – 2º HE
Todos los signos reciben la influencia de estas vibraciones energéticas y por lo tanto la posición de cada uno de los signos reflejará esta relación según el orden de aparición:
ARIES | LEO | SAGITARIO | = | YOD |
CÁNCER | ESCORPIO | PISCIS | = | HE |
LIBRA | ACUARIO | GÉMINIS | = | VAV |
CAPRICORNIO | TAURO | VIRGO | = | 2º HE |
Los 4 elementos y los 12 zodiacales en el orden constituyente
FUEGO: YOD |
AGUA: HE |
AIRE: VAV |
TIERRA: 2º HE |
Los cuatro mundos del Árbol de la Vida
El Árbol de la Vida se construye sobre cuatro Mundos que también nos darán pistas acerca del potencial de casa signo astrológico.
- Mundo de Emanación o Atziluth
- Mundo de Creación o Briah
- Mundo Formación o Yetzirah
- Mundo de Acción o Assiah
- Mundo de Emanación o Atziluth, es el Mundo Arquetípico, donde se origina la Organización Cósmica. Lo asociamos al Fuego Emanación de la Divinidad, del macro al microcosmos. En él hay 3 Centros de Energía, Kether, que no recibe correspondencia astrológica alguna por tratarse de Luz pura, Hochmah, asociado a Urano y Binah, a Saturno.
- Mundo de Creación o Briah. Es el Mundo donde empieza la organización de todo lo que será. En Briah empieza el proyecto del diseño de la forma. Asociamos Briah al Agua Divina, el orden establece lo que será la futura estructura de cualquier proyecto. La humanidad proviene de este Mundo, donde la interiorización de la Emanación-Volun tad se medita a sí misma. Ahí tenemos a Hesed- Júpiter. Gueburah-Marte y Tiphereth- Sol.
- Mundo Formación o Yetzirah. Es la Formación de todo lo tangible, e Centros de energía se inscriben en él: Netzah-Venus. Hod-Mercurio y Yesod-Luna. En este Mundo la dinámica humana y toda creación se diseñan, los sentidos, la coherencia, la forma se expresa.
- Mundo de Acción o Assiah. En Assiah, la Acción, es la materia que se encuentra con los distintos planos de manifestación de la energía, el plano astral inferior y etérico, físico. Los 10 Sephiroth no pueden ser comprendidos en un solo plano porque su naturaleza es cuádruple como 4 son los Mundos de dónde proviene su vibración. Así vemos que cada Sephirah se compone de su energía más material o mundana. El proyecto ha llegado a su fin, la acción es inminente. Ahí está la tierra, Malkuth, donde se inscribe el Ascendente. Estas formaciones sefiróticas se manifiestan a través de las diez chacras personales y de la Tierra, de los planetas, de las energías zodiacales, de los 4 elementos en su grado de manifestación del menos a más sutil.
La composición del Árbol Cabalístico con sus 10 esferas están relacionadas entre sí por 22 Senderos, que son caminos, etapas de manifestación del alma humana que transita para llegar a la supuesta perfección. Se le suman 10 Senderos más, por cada Sephirah o Centro energético es un camino en si mismo, por lo que tendremos 32 Senderos en total. Los 10 Sefiroth con los 7 planetas son fases de conciencia objetiva, los Senderos son fases de conciencia subjetiva. Las 22 letras del Alfabeto Sagrado, o Authioth también se inscriben en cada uno de los 32 Senderos de Sabiduría y se relacionan con el sistema astrológico. Ni Neptuno y Plutón se inscriben de forma manifiesta, pero se adscriben al Árbol de forma implícita. Neptuno por la vía de la Derecha, Plutón por abajo en la Izquierda
La Astrocábala identifica a Urano como co-regente de Acuario u octava superior a Venus. A Neptuno co-regente de Piscis, octava superior de Mercurio y a Plutón co-regente de Escorpio y octava superior de Marte.
El esquema del Árbol se despliega desde arriba, la Corona, Kether hasta abajo, Malkuth. En cada Sephirah o Centro de Poder se manifiesta un aspecto de la revelación del potencial de todo el resto del Árbol.
Los 10 Sephiroth representan 10 Arquetipos sobre los cuales establecer una vía de conocimiento. Cada una de las cualidades del Sephirah tiene su polo positivo y su polo negativo, es decir interno y externo y nos expresa el nivel de evolución de cada persona dependiendo de la activación de su organigrama, porque el Árbol complementa la rueda zodiacal.
Las Tres Columnas
Los Sephiroth se distribuyen a lo largo de Tres Columnas:
- La de la Derecha, Pilar de la Misericordia y Suprema Sabiduría y se le atribuye el principio Masculino.
- La Columna de la Izquierda, Pilar del Juicio o Severidad o Rigor, se le atribuye el principio o potencialidad Femenina.
- La Columna central Pilar del Equilibrio, factor armonizador entre las dos columnas. Posee las dos potencialidades y transmite a su vez las dos energías. En ella se fusionan y se distribuyen en el Árbol las dos polaridades.
El Árbol Cabalístico puede contemplarse como el macrocosmos desde fuera, o como el microcosmos, desde dentro. El alma humana se proyecta dentro y puede proyectarse hacia fuera.
Los Diez Sephiroth
Los Diez Sephiroth forman parte de Ain, lo Ilimitado, que se proyecta para se expresar aspectos más densos. Los Centros sefiróticos se manifiestan en tres dimensiones, longitud, anchura y profundidad y cada una de ellas en un principio, medio y fin. Estos conceptos son abstracciones que representan distintas etapas de la conciencia que existen simultáneamente en el tiempo y el espacio. Es por ello que el estudio de una carta natal cuenta también con esas definiciones, el principio de la experiencia, el medio que utiliza la experiencia para desarrollarse y el fin de ésta misma. Eso es lo que descubrimos con la Astrocábala.
Kether, la Corona
El Mundo de Atziluth, donde se sitúa KETHER, corresponde al arquetipo de la inspiración, de la chispa que llega sin mediador, que se revela a nuestro espíritu como un fulgor. Es el Yo puro, el espíritu supra-individual y universal identificado con el alma, con el Éter, de dónde nace la vida. Es Abstracción pura. A Kether no se le llega por la vía del intelecto, sino por la vía de la Revelación. Cuando hayamos asumido todo el trabajo, la Corona se depositará sobre nuestra cabeza coronándola para asegurarnos el título de Señores de la Conciencia Sabia.
Hochmah - Urano: Sabiduría
Kether se desborda y crea de sí mismo Hochmah, el segundo Sefirah, el primero de la Columna de la Derecha, la de la Misericordia y Sabiduría Suprema. En Hochmah están representados todos los arquetipos de las Fuerzas Zodiacales, el Orden angélico. Su cualidad es la de la Suprema Sabiduría porque conlleva el perfecto entendimiento de las cosas por vía intuitiva.Es la Supraconciencia, el pensamiento que se manifiesta mediante una radiación que no tiene sustancia física, pero que contiene todos los principios activos de lo manifestado en estado embrionario, por ello su Atributo principal es la Sabiduría y el Amor. Se manifiesta en cada circunstancia donde ponemos esa Voluntad de Amar, de volcar nuestra Sabiduría en el exterior. A nivel planetario se asocia a la energía de Urano. Si bien sabemos que la fuerza uraniana es de alto voltaje y suele provocar cambios, fragmentación, aunque también lo asociamos a los grandes ideales de verdad, de libertad, de fraternidad, etc. Para el análisis astrocabalístico, la alta frecuencia de Urano no sólo la relacionamos con los principios básicos enumerados, sino también con la energía del Amor Supremo, lo que identificamos con el impulso crísitico, con esa capacidad de conexión con el Logos a través de una alta vibración del ser. También lo asociamos a la Providencia. Por lo tanto será bajo esos efectos que también analizaremos la influencia uraniana en una Carta Astral.
Binah - Saturno: Inteligencia
Binah, tercer Sefirah y primero de la Columna de la Izquierda, la de la Severidad. Es la Inteligencia Reveladora y Creativa. La Columna de la Izquierda expresa el Rigor con el que deben hacerse las cosas, pero también recibe la influencia de la sabiduría de Hochmah, por lo tanto es esta fuerza que asociamos a la Madre Universal, el Mundo de los arquetipos se dibuja. Es el creador de la forma. Dice la tradición cabalística que en Binah hay oscuridad, renuncia, rigor, solemnidad, justicia, fatalidad, destino. Reconocemos claramente los atributos de saturno. Binah contiene el principio ontológico de la existencia, por lo tanto en Binah-Saturno un orden Primordial, Voluntad, pero también Amor. Así dejamos de ver al temible Saturno como esa limitación o fastidio y lo vemos como a ese sabio anciano que comprende y tiene la habilidad de captar los conceptos inherentes a la sabiduría. Es ese conocimiento que obtenemos después de bregar por la existencia. Solucionar los problemas de Saturno-Binah es encontrar la clave para alcanzar la tranquilidad interior, no desde la resignación, sino desde la certeza de las cosas bien hechas.Administra los contenidos de Capricornio y Acuario.
En ese punto, de la unión de Kether-Hochmah-Binah, surge una nueva creación encaminada a realizar una obra. Voluntad-sabiduría-organización.
Hesed - Júpiter: el Poder
Se sitúa en el Mundo de Briah, o Creación. El universo empieza a tomar forma. Nos encontramos en Hesed una actividad frenética muy exaltada se pone en movimiento. Sus atributos son los de la Abundancia y el Poder. En Hesed están muy activos los Maestros Ascendidos, los guías, las Huestes Angélicas, los seres de Luz. En Hesed opera la Bondad. Su representación planetaria es Júpiter, es le Poder Ejecutivo, el Cetro. La Cábala nos expresa a Hesed como un Centro donde opera la Beriyou, la salud en todas sus manifestaciones. De ahí la importancia de la energía jupiteriana en un tema. Porque la Beriyou o salud es una energía que se renueva y que en hebreo Hasimha, que traducimos por alegría que se transforma en Machiah que significa Mesías. La Alegría es una fuerza interna que nos permite alcanzar niveles de inspiración y trascendencia. La tristeza es la ausencia de la chispa divina, o sea que cuando queremos activar la parte jupiteriana que hay en nosotros, deberemos empezar por la alegría de vivir, porque la alegría libera las chispas de luz, penetra en las células del hombre, nos renueva, ilusiona, nos eleva y da la capacidad de reinventarnos, de romper las cadenas. Esta es la esencia de HESED, la de la sublimación de los sentidos y de ahí sacamos toda la energía renovadora, sanadora, benefactora que ha de aprovisionar nuestras alforjas de carburante y darnos un gran poder. Recordemos que al estar conectados todos los centros, Hesed recibe energías de Binah y Hochmah, orden y sabiduría. O sea que la acción de heded-Júpiter en nuestra vida nos permitirá convertir nuestra existencia en un paraíso, en actos de Bondad. Administra los contenidos de Sagitario y Piscis.
Gueburah - Marte: el Guerrero, el Corrector
Gueburah es el segundo Centro del Mundo de Creación o Briah. Hesed produce un mundo de tal felicidad que el hombre puede llegar a acomodarse siempre en la plenitud. Para cualquier creación es necesario abandonar la franja de comodidad. Gueburah tiene la fama de ser un corrector implacable, pero también alimenta nuestra Voluntad, de dónde sacamos el impulso para cumplir con nuestros compromisos, nos provee de afán de Justicia para evitar cargarle a otros nuestras propias responsabilidades, si somos justos sabremos equilibrarnos y reconocer nuestros propios errores y aciertos. Sacaremos Fuerza, para no desfallecer cuando surjan las pruebas de la vida, y todo ello para obrar en Rectitud, porque Binah elabora el guión de nuestro destino, es la Forma. Hesed nos da la posibilidad de recrearnos en él, pero Gueburah activa los mecanismos de rectificación de todo aquello que no supimos comprender en su momento.
En la vida social y particular vemos que las actuaciones de Hesed y Gueburah se suceden alternativamente. Necesitamos, en este punto de la evolución, del realismo de Gueburah y el idealismo de Hesed, porque esas dos manifestaciones son las que conforman el mundo de Formación. La justicia tiene que ser atenuada por la clemencia. Gueburah-Marte es un elemento dinámico que nos invita a sortear los obstáculos. Sabemos que sin sangre no hay vida, sin carácter no ha realización. Gueburah no es destructivo, sino constructivo con el mazo en la mano. Su título es Un poderoso Guerrero en su Carro y su Sendero el de la Inteligencia Radical. El símbolo del Amor y el símbolo de la Lucha se dan la mano y se unen en amoroso servicio al Ser Humano. Cuando un alma busca aprender por la experiencia, Gueburah procede a su enseñanza, lo hace a veces de manera perturbadora, pero lo grava a sangre y a fuego en la profundidad de su conciencia. Administra los contenidos de Aries y Escorpio
Tiphereth - Sol: la Conciencia y la Belleza
Tiphereth en el Pilar del Centro nos transmite la idea de la conciencia, la expresión de la armonía de la belleza interior que ha de reflejarse un día en el exterior. En este 6º Centro la conciencia celestial y la del hombre se encuentran, se perciben, se unen para dar lugar a la evolución de todo lo que ES. En la filosofía exotérica no se percibe nada más allá de Tiphereth, por eso su símbolo astrológico es el del Sol. En este Centro opera de forma práctica la Fuerza Crística para el hombre. En Hochmah reside el Amor Crístico, pura emanación de Luz Líquida. En Tiphereth la elevación del alma hacia un reconocimiento de su grandeza. Este Centro expresa el último eslabón de los arquetipos primordiales. A partir de Tiphereth el arquetipo se encierra en el mundo de la forma para pasar por la experiencia de los sentidos. En este Sephirah se unen las tendencias de los Mundo de Arriba y los de Abajo.
La experiencia metafísica de Tiphereth se mezcla o se une a la experiencia física. Tiphereth expresa su energía a través del Sol y de nuestro corazón. Y es desde el corazón desde donde podemos vislumbrar toda la belleza de los Mundos de arriba y de abajo, de las formas. Entonces espíritu, mente, emoción y cuerpo se convierten en una unidad armoniosa.
El programa del Sol es el de la experiencia metafísica personal, desde la conexión con el Mundo de los Arquetipos y con el de la forma, en nuestra realidad cotidiana. Suele decirse que muchos místicos creen que la revelación de la conciencia les llevará al Sermón de la Montaña, cuando en realidad les ha de llevar al establo.
Si bien la Conciencia en Tiphereth opera a tres niveles, espíritu, psique, y corazón o fuego central, en este Centro la llama de nuestra chispa individual pervive, almacena las experiencias adquiridas mediante la vitalidad de Hesed y Gueburah. Vivir en la esencia de Tiphereth equivale a conectar con nuestro Rey Interior, nuestro Yo superior de forma intuitiva.
Los cabalistas llaman a Tiphereth Shemesh, (Shin, Mem, Shin) o la Esfera del Sol. Notemos que todos los dioses solares en todas las tradiciones tenían poderes curativos. Para nosotros el Sol es el punto central de nuestra existencia y desempeña un papel fundamental en nuestro sistema orgánico. Tiphereth es pues un distribuidor de energías en todas las esferas y es el sanador de nuestras vidas. La manipulación de la luz del sol, o sea de la conciencia solar y crística ha sido y es un factor terapéutico de primer orden. La conciencia Tiphereth-Sol nos permite actuar en nuestro organismo a todos los niveles. Las meditaciones que parten de la chacra solar están basadas en la energía de Tiphereth. Cuando rehusamos aceptar nuestro papel en la vida enfermamos a nuestro Tiphereth interno. Sabemos que la represión es uno de los factores que engendra la enfermedad. El vicio asignado a este Centro es el orgullo. El orgullo nace del egoísmo, de ser exclusivamente centro de nosotros mismo. Esa vía sólo nos conduce a la soledad, nos aleja de la Unidad porque el alma extiende sus deseos hasta los confines de la posesión y se vuelve a contraer sobre sí misma. Administra los contenidos de Leo
Netzah - Venus: Belleza y Victoria
Netzah es el séptimo Shephirah debajo de Hesed. El primero del Mundo de Yetsirah o Formación y el segundo de la Columna de la Misericordia, bondad, gracia y tolerancia. A medida que descendemos por el Árbol Cabalístico, podemos comprobar cómo las fuerzas de sus centros se materializan de forma progresiva, tanto las positivas como las negativas. Hemos visto más arriba que el amor emanado de Hochmah es tan puro, que sus radiaciones son captadas con cierta dificultad y nos cuesta aprovecharlas.
En Hesed ese amor se transforma en afán de conquista, de gozar con los deseos, tanto los sublimes como los emocionales y los materiales. Así pues en Netzah ese afán, ese amor y esos deseos ya tienen forma concreta, tangible y somos capaces de percibir, de sentir, de crear mediante el aporte energético de este centro de vida. Venus es el rostro visible de Netzah, y administra los contenidos de Libra y Tauro. Netzah representa lo intuitivo de nuestra naturaleza, los instintos y las emociones, donde el arquetipo de la esencia de los sentidos nutre toda la forma. Su representante planetario nos da una idea más cercana de lo que es este Sephirah.
Entre las diferentes corrientes filosóficas y sus interpretaciones, existen dos cultos a Venus-Afrodita. Una la Afrodita Urania, la celestial nacida de los genitales castrados de Ouranos arrojados al mar, y que, representa el amor del cuerpo y el alma, y otra Afrodita Pandemos, hija de Júpiter y Diana, asociada al amor físico. Ambas inspiradoras de belleza y amor poético, de discurso persuasivos que simboliza el poder transformador y creativo del amor. Allí donde se genere crecimiento, se apoye una visión, se desarrolle un potencial, o se aliente una chispa de creatividad, allí está Venus influenciando a todo el que sea susceptible de captar sus efluvios. La figura de Venus Afrodita es la Amante de la Sonrisa y la tentadora.
Vemos en la mitología la descripción esencial de este Sephirah que se expresa mediante lo sublime, creando la expresión más elevada del amor, pero también provocando en el ser humano la apetencia de las cosas terrenales, los instintos y la sensualidad de los sentidos. De este Centro de vida nos viene la inspiración, la sensibilidad, la armonía de las formas, la búsqueda del complemento ideal y la plenitud tanto física como espiritual. Netzah capta las energías de Urano, (nace de él) y de Hesed, (también nace de él), manifiesta en nuestros cuerpos todas aquellas sensaciones que nos aguijonean para tentarnos con las apetencias de las cosas de la tierra y las del cielo, las ganas de poseerlas, experimentar con ellas. Netzah tiene esa responsabilidad por ser el primer Sephirah del Mundo de formación y la semilla del Elemento Aire (ideas-lógica-razón), que deberá manifestarse más adelante en el siguiente Centro de Poder.
En este 7º Sephirah construimos la esencia de nuestra personalidad respecto a la forma, los sentidos, la percepción y manifestación de los instintos y sentimientos. Poder y Belleza para alcanzar la Victoria, es la Victoria del Amor a lo sublime por de la pasión de los instintos, que sin negarlos los hemos elevado. Y la Belleza de Netzah eleva nuestro Poder interior, nos lleva a la Victoria para alcanzar la Verdad.
Las palabras del filosofo del siglo IX Abu Sulaiman al-Davani expresan de maravilla este Centro: "La música y el canto no pueden producir en el corazón aquello que no existe ya en él."
Hod: la Gloria, la Verdad
Hod es el 3 Sephirah de la Columna de la Izquierda y el 8º del Árbol, y representa la perfección a través de la Verdad. De este Centro recibimos los impulsos intelectuales que nos llevan a no contentarnos sólo con los placeres de Netzah-Venus. Con Hod corregimos los posibles desmandes vividos bajo el imperio de los sentidos. Hod es el encargado de discernir lo que es lícito de lo que no lo es y de aplicarlo a nuestras vivencias. Después de gozar de la experiencia del placer, comprender mediante la energía de Netzah lo que nos permite y transmiten los sentidos, Hod nos propone comprender por la vía de razonamiento, del análisis en qué consiste la vida misma, la forma la experiencia de la vida. En Hod reina la ley de la analogía, “Lo de Arriba es igual que lo de Abajo”, y observando puede llegar a comprender los procesos de Arriba y volcarlos Abajo. Por ello se atribuye a Hod el poder alquímico de la Verdad, de la grandeza del espíritu cuando recobra la cordura.
También se conoce a Hod como la esfera donde la magia del poder del intelecto resuelve todos los problemas a imagen y semejanza de cómo se haría en el mundo de los Arquetipos de Pensamiento. En Hod se descubre esta visión de las estructuras. Sólo tenemos que conectarnos con esa analogía para comprender cualquier proceso, desde el infinitamente pequeño a lo infinitamente grande. Todas nuestras circunstancias son operaciones mágicas en las que ponemos a prueba nuestro poder. Es el poder de la Voluntad enfocada a la Verdad de lo que ES. Administra los contenidos de Géminis y Virgo.
Yesod - Luna: Fundamento
Yesod. Base del la Columna del Equilibrio. Se le atribuye la esencia del fundamento del Universo tal y como se nos desvela, su imagen es la Luna, cuna de las emociones, útero, cobijo maternal. La función de Yesod es la del Purificar porque filtra los contenidos no aptos para la expresión de la imagen, de la misma forma que un televisor sólo recibirá las señales que del emisor. Su acción permite al Mundo de la Forma cohesionarse. Su función es la de la imagen, a imagen y semejanza de lo que virtualmente se diseñó en un momento dado. La madre cobija en el útero el fruto de la unión del espermatozoo y el óvulo, por lo tanto en Yesod no se podrá escenificar aquello que no se diseñó previamente. Bien es cierto que Yesod corrige, pero corrige mediante una función de filtro. Cada acto de nuestra vida tiene un origen espiritual, mental, emocional para acabar densificándose y ser forma, sea pensamiento, sentimiento, o materia. Todo se obra mediante la acción de Yesod y el Éter que administra que es el que hace de puente entre los mundos de Arriba y los de Abajo. Yesod es considerado por los cabalistas como la morada de la Ilusión, es maya, porque allí reinan todas las imágenes. La rueda del nacimiento no es otra que la del aprendizaje de los Senderos del Árbol, de lo microcósmico a lo microcósmico. Yesod es la Esfera de la Luna porque el satélite de la Tierra guarda la memoria de todos los planos de manifestación por las que el ser humano va pasando. Durante las 4 fases de la Luna el ser humano tiene la posibilidad de conectar con la sabiduría ancestral que almacena, desde el alba de su nacimiento hasta el ocaso de su existencia. La Luna es más antigua que la Tierra. Si Yesod-Luna está en perpetuo movimiento de flujo y reflujo es para darnos la posibilidad de percibir los misterios desde dentro y desde fuera. La iniciación a los misterios de la Cábala parte precisamente de este principio, ora dentro, ora fuera, el cabalista utiliza su fuerza para captar el mensaje y plasmarlo en su realidad. Las Fuerzas de Yesod-Luna son tremendamente poderosas, de ahí la leyenda de los influjos negativos de la Luna y de los positivos que permiten la gestación y eclosión de la forma. La mujer es la digna representante de Yesod por poseer ese doble etérico en su misma función de mujer fecundadora y fecundada. Administra los contenidos de Cáncer.
Malkuth: la Acción
Malkuth es el reino de kether en la Tierra de nuestras experiencias. En Malkuth existen los principios de los 4 elementos, Fuego, Agua, Aire Tierra. Todas la partículas de nuestro universo personal, microcosmo se reúnen en Malkuth porque es el Sephirah que nos permite la cristalización de las experiencias adquiridas en los distintos mundos, el resultado “estable” de la coherencia de la conciencia que se ha puesto en marcha para permitirnos SER.
Los Sephiroth del Árbol encuentran el punto culminante en la Tierra de la experiencia material como punto de anclaje hacia nuevas realidades que permiten al SER encontrar el camino de vuelta. Si las energías de Yesod son la pasta con la que se expresan nuestros sueños, el alma sueña ser “algo” único. Malkuth es el sueño pasado ya, hecho carne y por lo tanto transmutado. De Tiphereth a Yesod el ser recibe la vida para cristalizarla en Malkuth, que lleva en si todos los elementos cristalizados de la creación, la de Arriba y la de abajo. Hay en Malkuth una espiritualidad y es que en Malkuth arde el Fuego de la espiritualidad, bulle el Agua de la emanación emocional, circula el Aire del fermento del Verbo Creador y se consolida la Tierra de la realización.
Malkuth es el Reino de la Muerte porque es el Sephirah que nos permite la constante renovación. Debemos volver a la naturaleza para que ésta nos acoja y nos devuelva a la vida. Cuando no respetamos las leyes del Cielo, o las de la Tierra, nos devuelven al Olimpo para permitirnos volver a reconsiderar nuestra evolución. La Naturaleza, regida por Binah, nos somete a su “ley”. Representa nuestro Ascendente, porque en el están inscritas nuestra Tablas, aquello que ya forma parte de nuestro ser y debemos reconocer y utilizar.
Vida- muerte – vida
Empezamos el recorrido del Árbol de la Vida, de la sabiduría, desde la copa, o sea desde el espacio simbólico que recoge la energía Divina, hasta el Mundo de Assiah, donde la forma tiene su máximo esplendor y desarrollo. Nos hemos referido a menudo del axioma hermético: “Lo de Arriba es igual que lo de Abajo y lo de abajo es idéntico a lo de Arriba”, y este es el resultado. Cada una de las esencias planetarias y sephiróticas forman parte de nuestra historia personal, circulan en nuestro organismo. Las fuerzas zodiacales son fuerzas vivas en nuestro interior y ser capaces de conectarnos con ellas e interactuar es, en mi opinión, una ciencia que nos permite comprender todos los procesos existenciales en los que estamos inmersos. Es cuestión de tiempo que la humanidad utilice en toda su amplitud esta sabiduría ancestral, desde la conciencia y la plenitud del Amor, que es en definitiva la experiencia de la culminación.