Descubre los arquetipos astrológicos de los signos de Aire: Libra, Acuario y Géminis, según la Astrología Cabalística. Quiénes son y cuál es su programa de vida.
Triada de Aire, signos Vav
Libra
(24 de Septiembre al 22 de Octubre aproximadamente).
Signo cardinal de Aire, 7º del Zodiaco constituido y constituyente, puerta de entrada de las fuerzas mentales que han de transformar en profundidad la vida. El Aire representa la razón, la lógica, las ideas.
Llegado a este punto, el Yo individual debe compartir sus objetivos. La etapa de Aire tiene un nexo común: el “sacrificio” de lo “mío” por lo “nuestro”. Es el comienzo de una vida basada en la razón más que en la emoción para unir lo complementario, favorecer asociaciones en las que el propósito sea la integración.
Es un signo muy idealista, volcado en conseguir que la lógica y la razón sean los atributos de cualquier negociación. Es el signo de las eternas dudas, porque las ideas no están aun formadas, les falta madurez y Libra necesita el apoyo del entorno, busca la fuerza del clan para afirmarse, un aliado, una compañera, un socio con quien poder comparar, relacionarse y descartar lo que es lícito y bueno de lo que no lo es. El altruismo gana la partida al egocentrismo.
Una de sus principales tareas es facilitar la convivencia social y para lograrlo veremos a Libra retocar, rectificar, reconsiderar su comportamiento a lo largo de todas las etapas de su vida. Tal y como demuestra su símbolo gráfico, la balanza, necesita encontrar su equilibrio, aprender a armonizar sus tendencias y conseguir que su comportamiento sea lo más parecido a una “obra de arte”. Si se le pregunta lo que más le disgusta sin duda alguna responderá que las discusiones, la injusticia; prefiere no definirse si con ello provoca el conflicto, lo que por cierto a menudo se reprocha a este signo cuando no se comprende su dinámica.
Su planeta regente es Venus, lo que le otorga un talante encantador, amoroso, distinguido y hace de Libra un eterno enamorado de la vida. Es delicado, elegante y reservado. Los riñones son los órganos representativos de Libra.
Acuario
(21 de Enero al 19 de Febrero).
Signo fijo de Aire, representa el estadio de interiorización de las fuerzas del pensamiento. Acuario es el templo de la inteligencia concebido para albergar el inventario de las distintas calidades energéticas que posee el ser humano, para clasificarlas y ordenarlas y finalmente constituir lo que ha de ser ese edificio donde la “perfección” es la máxima culminación.
En Libra, se inicia el proceso del Aire y descubrimos el mundo de la razón. En Acuario el pensamiento se moviliza para que la lógica razonable establezca una perfecta sintonía, para que la ciencia de la observación llegue a sus conclusiones; por ello la Astrología atribuye a Acuario los descubrimientos, los inventos, las innovaciones. Aplicando este razonamiento a la naturaleza humana, nadie mejor que Acuario para “predecir” el comportamiento social por su forma tan analítica de ver la vida.
Es el signo de la fraternidad universal, de la amistad. Su programa profundo consiste en encontrar las personas que se ajusten a la perfección a su esquema mental para construir ese ideal de sociedad donde la humanidad pueda establecer una comunidad de pensamiento que permite la evolución.
Extraordinario, extravagante, estrafalario, son algunos de los calificativos más representativos de Acuario, donde la razón gana definitivamente la partida a la pasión y es por lo que suele parecer más bien frío en sus demostraciones afectivas. Su curiosidad es ilimitada.
Su planeta regente es Saturno en co-regencia con Urano; por una parte, Saturno le dará solidez y capacidad de estructurar, por otra, Urano, el afán de libertad y una visión holística del mundo. Rige las piernas y pantorrillas.
Géminis
(21 de Mayo al 21 de Junio).
Representa el estadio de exteriorización de las ideas. La mente, después de gestar en Libra y de haber llenado su espacio interno en Acuario, promueve la comunicación de esas ideas razonables que tienen que proyectarse, manifestarse y convencer al auditorio.
Regido por Mercurio, este arquetipo le otorga una gran inteligencia y mucha habilidad en el manejo de la palabra. Géminis tiene fama de locuaz, de alguien que no puede vivir sin contar su película, o sin buscar cómplices para delegar o proyectar sus deseos. Entre esa clase zodiacal nos encontramos a los más competitivos y versátiles comunicadores de la sociedad, personas que, presas de la necesidad de expresarse, hablan, se interesan, opinan de todo. A menudo se imputa a Géminis el tener dos caras y apuntarse a varias movidas a la vez, pero en realidad todo se debe a su gran capacidad de adaptación, la cual le ayuda a moverse en todos los frentes en permanente estado de alerta.
En Géminis ya no cabe el individualismo cuando trabaja la vertiente más elevada de su signo ya que su tarea consiste en reunir la “hermandad” y ser puente de comunicación, experto en saber lo que le interesa a cada cual. Le encanta trabajar en equipo, liberar su pensamiento de condicionantes estereotipados y crear en total libertad.
Su máximo compromiso: la “obligación” de ser transparente y velar por la Verdad. Lo peor que puede hacer Géminis es mentir, porque si el edificio de la Verdad no se construye sólidamente, la autenticidad se desmorona y la consciencia sufre. Es por ello que los medios de comunicación, -regidos por este signo-, tienen una gran responsabilidad. Cuando Géminis toma consciencia de su auténtico programa, los muros de la incomprensión caen, y triunfa la Gran Verdad por encima de intereses personales y en favor de la colectividad.
Su símbolo gráfico son los gemelos mitológicos, -Castor y Pólux-, que representan esa doble realidad de las cosas y la dualidad de su comportamiento, entre prosaico y divino. Géminis rige los bronquios, brazos y manos.