Dice la leyenda que cuando una alma noble consigue realizarse acaba por tener su lugar como estrella del firmamento, junto al Carro de Luz de la Mercabah, luce para siempre en la bóveda celeste. El día 5 de diciembre será recordado en la tierra y en los cielos por haber acogido a esa nueva estrella que ahora brilla en las alturas, la de Nelson Mandela.
Nacido el 18 de julio 1918 a las 14h 54’ en Qunu, poblado de 300 habitantes cerca de Umtata en el Transkei. Hijo del jefe de la tribu Xhosa, le pusieron por nombre Rolihlahla , que ya era el presagio de una vida de luchas, ya que en la lengua de su pueblo significa coloquialmente "alborotador", "el que tira de la rama de un árbol", y eso es precisamente lo que hizo desde sus principios, renunciando a seguir los pasos de su padre para ser jefe de tribu, acabó “tirando” con fuerza del árbol del apartheid en Sudáfrica hasta que consiguió debilitarlo y desarraigar el duro régimen con el que se segregaba al pueblo negro.
Se hizo abogado e ingresó en el Congreso Nacional de África, (CNA) en 1944, donde lideró un movimiento de lucha contra la opresión del pueblo africano y contra el apartheid. Su ideología de la no violencia inspirada en Gandhi le llevó a organizar campañas de desobediencia, por lo que finalmente fue encarcelado en agosto del 1962. Su cautiverio duró 27 años y se convirtió en el preso más famoso del mundo. Fue liberado después de no pocas presiones internacionales, en febrero 1990 a la edad de 72 años. Recibió el Nobel de Paz en 1993.
Se convierte después en el primer presidente negro de Sur África el 2 de Mayo de 1994 y le han sido otorgados más de 50 doctorados honoris causa por múltiples y prestigiosas universidades alrededor del mundo. En la India recibió el premio Bharat Ratna. Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional (1992). Premio Internacional Simón Bolívar, y hasta el de la Fifa, entre otros muchos.
La vida de un ser humano se descubre con su programa de vida y con la capacidad para llevar a cabo su misión al encarnar en cada existencia. Nelson Mandela es Cáncer con Ascendente Sagitario, fuego y Agua presiden su nacimiento, dando a entender que se trata de alguien que, cargado de contradicciones, va a estar sometido al impulso emocional y la pasión por la libertad.
Es como llegar al mundo con una carga ancestral, (Cáncer), pero llevar en las alforjas el material de la libertad y pasión por salir e ir más allá de los límites, (Sagitario).
Más allá de analizar los puntos convergentes o divergentes de sus aspectos planetarios y de su trayectoria vital, ampliamente conocida, lo que deseo remarcar es algunos de los programas de sus planetas por Grados de Poder, y de sus Genios planetarios, información que la Astrología Cabalística que diseñó Kabaleb, nos ayuda a entender mucho más los patrones o experiencias de cada ser humano.
Comprobamos que la posición de su Sol en casa VIII no deja lugar a dudas, se trata de una persona que ha venido a luchar contra sentimientos anclados en el pasado, ocultos, (Casa VIII), herencias que se enfrentarán a su Ascendente como el que necesita demostrar contra vientos y mareas que hay que traspasar las fronteras de lo caduco de la personalidad, -de un pueblo en este caso-. El hombre negro sentía un tremendo temor hacia el hombre blanco-, y revindicar la libertad de su Urano en Acuario en Casa III, la de la expresión, la de la unión fraternal, siendo el único planeta que tiene en las Casas personales, (del Ascendente a la Casa VI), siendo que toda su dinámica planetaria se sitúa en la parte colectiva, (del descendente a la Casa XII), por lo tanto vuelca su potencial hacia la sociedad. Hay que puntualizar que Venus en Casa VII, le ha dado siempre ese aspecto de gran seductor, y su Júpiter en conjunción con Plutón en Casa VIII, ha reforzado su tremendo carisma. Pero el destino le reservaba ir más allá de lo personal y dirigirse hacia lo más grande, hacia experiencias que debían suponer una revolución, ya que con un Marte en Libra y en Casa XI, esta es una posición de un gran luchador que aboga por la defensa de la Libertad, (Por Casa XI y por Libra).
No obstante el análisis que deseamos abordar es el del programa humano. Observamos que su Sol en tercer decanato de Cáncer y en grados de Tiphereth, de 25 a 26º nos habla según Kabaleb, de anticipación, de experiencias emotivas que se presentan con una tal fuerza que no las puede rehuir, navegando entre dramas, viviendo situaciones tensas. Aquí la fuerza primordial de los sentimientos se encuentra unida a esa otra fuerza que en su momento surgirá y que, con el ímpetu de una catarata, hará que el nativo precipite esos sentimientos sobre los demás. La persona con este Decanato muy activado, como es el caso por la presencia de planetas, nos perfila a un manifestador emocional ya que se trata de un decanato Piscis, regido por Júpiter. Para vivir una existencia acorde con este programa, la personalidad de Mandela ha pactado de antemano por volcarse hacia un proyecto universal.
Con los grados de Tiphereth, Kabaleb nos dice:
Expresan una potencia lumínica importante, una voluntad operativa enfocada a conquistar objetivos elevados o importantes y además es el que debe despertar conciencias ajenas y, dependiendo del nivel evolutivo de cada uno, los objetivos irán enfocados hacia uno u otro propósito. Iluminar caminos sombríos. La parte contraria de este grado lleva a tapar con nubes el sol, o que la personalidad no sepa asumir su papel. Hinchazón de la personalidad, ego inferior muy potente. Brillarán pero con brillo opaco.
Podemos decir que está muy claro que Mandela ha utilizado con creces esa potencia lumínica. En Cáncer la exteriorización de ese material le han hecho vivir entre personas que están en "peligro moral" para "salvarlos". Este ha sido el resumen de su existencia, la fuerza de su corazón le llevó a no cejar en su empeño de creer en que la voluntad enfocada al bien común era su empeño, por lo que había de luchar toda su vida y llevarlo a cabo, primero con las herramientas de la ley, (Marte en Libra), y después la energía de dos planetas más en grados de Tiphereth también, Saturno a 15º01 de Leo, (en el Trono de Tiphereth) y Plutón a 5º32 de Cáncer en su signo, que dan fe de esa fuerza que se merece una estrella en el firmamento por derecho propio.
Para no hacer demasiado largo este análisis que lo que pretende es dar una visión del destino hacia el cual un personaje de esta talla se encomendó, daremos finalmente las directrices de su programa con los Genios de su Sol.
El Genio Físico de Mandela es el 23, Melahel, un Trono que según los textos de Kabaleb nos revela una fuerza que tiende a construir con las Aguas Primordiales, madres de todas las Aguas, madres de todas las emociones para edificar su mundo ideal. Su esencia es la de la fuerza del amor en sus múltiples manifestaciones, y cuando el amor se deposita en una estancia, la limpia, la sana, la cura. Pero esta tarea deberá primero ejercerla en si mismo, limpiando sus canales de expresión, su cuerpo, sus palabras, sus actos porque revierten en la sociedad, que espera de él la curación. Con el Sol, El Ego Superior, elige este programa para experimentar lo mejor y más sublime de sus sentimientos y produce al pacifista activo, experto en saber aportar a la sociedad la “medicina” justa, lo que se necesita y eso le lleva hacia actitudes audaces, que constituirán un desafío para la sociedad. Personalidad que está en vanguardia del grupo humano. Será antibélico por excelencia, enemigo de toda violencia. Como vemos ha cumplido con esa parte de su programa de vida y la humanidad le debe mucho a un ser que buscó “curar” la enfermedad del apartheid y su voluntad estuvo enfocada a la unión de los pueblos.
El Genio emocional es el 44, Ylahiah. Un Genio que también manifiesta la grandeza de su corazón ya que se sitúa en el Coro de las Virtudes, los Genios que ocupan su lugar en Tiphereth. Kabaleb nos resume magistralmente el programa de Ylahiah:
La esencia es la "Talento Militar", la que nos permite ganar las batallas que la vida nos presenta. Cuando emprendemos el camino de ascenso en el Árbol, abandonamos paso a paso las posesiones materiales para dedicarnos a más elevados preceptos y es cuando nos encontramos con todas aquellas cosas que en el camino de bajada no hicimos ordenadamente, lo que se convierte en karma y nuestra tarea consiste en rectificar. Ganar no significa aniquilar al adversario, sino tratar de conciliarse con él, desarmándolo con la única herramienta capaz de sanar las heridas: el Amor.
Sin duda este es el programa de una tarea que ha dejado muy impregnada su existencia, con la necesidad de ordenar las cosas según un modelo claro de conciencia y con el afán de justicia. La persona nacida bajo la influencia de este Genio será alguien con fuerza y bravura, capaz de cargar con su karma y entregarlo todo.
Haber vivido y penado pero haber logrado lo que logró esta alma grande, que con un karma difícil de llevar, los años de cárcel que le llevaron a tantas experiencias, le dejaron la mejor enseñanza, ser capaz de enfocar todo su programa humano a destino y sin rencores, para demostrar que la fuerza del Amor siempre es la que acaba por triunfar y dejar una huella indeleble no solo en el Olimpo, sino en nuestros corazones.
Muy bueno , tu articulo,
Muy bueno , tu articulo, Milena. Hay personajes excepcionales, con una carta astral " especíal ". Muy movidos adentro, mueven mucho a los otros, y cambian el mundo. El bien y el mal son angeles hermanos , misma cara del mismo ser, y todo el camino de nuestra vida es revelar el bien, en todos sus aspectos. Madelo lo hizó , y suerte, tendrémos varios otros que lo haran , para crear un mundo mejor , una Tierra Pura a cada paso.
Un abrazo fuerte