Luna Nueva de Libra 2018

El equilibrio entre la razón y la emoción es el lema central de esta lunación que nos invita a pactar con las tendencias contrarias de nuestra personalidad

Una lunación para pactar

La Nueva Luna de Libra cae en el segundo decanato de Libra, expresando la anticipación del trabajo acuariano. La precipitación es una característica clave de estos decanatos, pero en este caso, la necesidad de adelantarse puede responder a un pacto tácito para no quedarnos estancados en sistemas antiguos, en el pasado. Quirón retrograda a Piscis, lo que permite precisamente revisar patrones antiguos; pero Saturno y Plutón dejan de retrogradar para que todo se alinee, y se haga en orden. Por lo tanto, no nos extrañemos si nos entran las prisas, -porque es bueno meditar las cosas, pero tampoco es cuestión de eternizarse-, tendencia, por cierto, muy Libra. Kabaleb decía respecto a esta conjunción Sol-Luna en los grados en los que se manifiesta, que la potencia lumínica que las energías cósmicas ponen a nuestra disposición es tan impresionante e importante, que puede suponer un enorme aliciente para que la voluntad operativa, enfocada a conquistar objetivos elevados, sea una realidad. Se trata de diseñar el presente-futuro con las herramientas que poseemos, (cada cual debe conocer las suyas), teniendo muy claro el trabajo que debemos realizar.